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viernes, 30 de marzo de 2012

Procesión


De la enorme masa que avanzaba lentamente se escuchaba un solo grito , como de rabia guardada durante mucho tiempo,como con genuino rencor…” viva la virgen ,carajo”

Unos brazos enfundados en relojes dorados ,unos puños que hacían saltar las venas y el aliento a vino y a dentífrico .

Caía el sol y les dibujaba la silueta envolviéndolos en un aura rara ; luminosa y oscura.

El odio ahora se dirigía a la capillita . Ya no eran los que eran  ;  eran el odio llevando a una virgen en andas...

Si uno elegía pararse a cierta distancia frente a ellos y contemplar la escena, podía observar la urgencia de esa virgen por llegar a su capilla, por librarse de ellos ,por el perfume de sus flores en el jarrón…


Cada año, el trámite se hacía más complicado ,la gente salía a exorcizar sus odios paseándola cual trofeo de caza  y su mirada suplicaba que la dejen descansar ,que estaban  San Miguel   y San Pantaleón  al lado suyo en el altar…
Que ya no quería ser parte en ese ritual de odio e impotencia.


Texto: K .Olivera
Foto: J . Koudelka